Es verdad que se lanzó hace solo dos meses y que aún es pronto para enterrarlo, pero apunta a ser otro de los proyectos fallidos de Google.
Google Stadia es la plataforma de juegos en la nube que lanzó Google hace dos meses, utilizando sus poderosos altavoces -el dinero y sus fanboys- prometió traer a nuestras casas el juego en streaming, se iban a acabar los ordenadores y las consolas, con tener un mando, un Chromecast y una buena conexión a Internet íbamos a poder deshacernos de todo el hardware de nuestra casa.
Pero claro, las cosas no eran ni han sido como las anunciaban los fanboys.
En primer lugar el juego en streaming no lo ha inventado Google, de hecho hay decenas de empresas -entre ellas Microsoft y Sony- que llevan años inviertiendo en el tema, Microsoft está a punto de lanzar su proyecto pero Sony lleva ya tiempo con su Playstation Now, años y años de experiencia que la prepotencia habitual de Google no ha tenido en cuenta.
A día de hoy el juego en streaming solo sirve para juegos monojugador, en cuanto pones multijugador el lag te deja en tal desventaja que no es practicable.
En cuanto al juego monojugador sólo admite resoluciones relativamente bajas y con algunos cortes.
Google iba a acabar con todo eso porque son los reyes de Internet, su red propia y sus algoritmos de predicción iban a acabar con ese problema... claro, y los burros vuelan. No dudo que Google tenga una red muy optimizada, pero la última milla es la clave, Google no controla la red de los proveedores locales de Internet, las chapuzas de los instaladores y las malas configuraciones de las redes de los diferentes hogares, pretender garantizar de una manera profesional, una latencia y calidad de red adecuadas es imposible cuando no controlas todos los elementos. Esto lo sabe cualquiera con dos dedos de frente tecnológicos, pero no los directivos de Stadia, supongo.
Estoy 100% seguro de que en las oficinas de Google el juego es perfecto y sin retrasos, pero en una red de una casa nunca va a poder ser así. La teoría de Google funcionará cuando asuma que la calidad de la conexión de la red de Google al dispositivo conectado a Internet es del 50% siendo muy optimistas.
El catálogo es muy pequeño, y encima de pago, ¿Cómo van a poder competir con Playstation Now o con Xbox game pass o incluso con Origin o el servicio de subscripción de Ubisoft? Ya hay que ser optimista irredento para pensar que cualquier gamer hardcoreta se va a apuntar a esto. Además sin apenas exclusivos, y los que hay muy lejos del nivel de Xbox, Playstation, Switch o Windows.
Ahora mismo además hay que pagar 10 euros al mes y solo tienes unos pocos juegos gratis de su pequeño catálogo, el mismo precio que PS Now con un catálogo mucho menor.
Google además vende un servicio en el que te dice que puedes jugar donde quieras, donde quieras menos en tu móvil o tablet, que yo sepa no existe todavía esa posibilidad, y menos aún en dispositivos Apple.
Por cierto, su mando de Stadia además funciona por Wifi, no por Bluetooth, menos mal que permite usar un cable USB si no más ruido y latencia para el juego.
En conclusión, un producto lanzado antes de tiempo, sin una investigación tecnológica y del mercado necesaria que si que ha realizado la competencia, rodeado de una fanfarria y una prepotencia digna de Google y que se está estrellando.
Los fansboys os dirán que aún es pronto, que es un producto joven, que pueden aprender. Más les vale darse un baño de humilad y preparar Stadia 2 para lanzarlo en un par de años.
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